Con el paso del tiempo nuestros suelos no lucen como el primer día. La suciedad y el desgaste hacen mella en ellos; y aunque realicemos las limpiezas habituales, no son suficientes para que luzcan en todo su esplendor. Uno de los acabados que más resaltan el brillo y el color de los suelos es el efecto mojado.
Por suerte podemos encontrar este acabado en una gran variedad de productos destinados al mantenimiento y protección de los suelos.